La danza oriental es un tipo de baile que, además de resultar divertido, aporta beneficios para la mujer tanto físicos como psicológicos: aumenta la autoestima, mejora la flexibilidad y tonifica la musculatura del suelo pélvico. El suelo pélvico es un conjunto de músculos que cierra la cavidad abdominal a modo de «puente colgante». Este puente mantiene los órganos pélvicos (vejiga, útero, vagina y recto) en su sitio y se encarga de que funcionen correctamente. El exceso de peso, el estreñimiento o momentos vitales de la mujer como el embarazo, el parto vaginal o la menopausia pueden debilitar esta zona provocando pérdidas de orina, prolapsos o relaciones sexuales dolorosas. Para reforzar esta zona es aconsejable practicar movimientos de vientre y de cadera como los que contempla este tipo de danza, cuyos beneficios son los siguientes:
1. Ayuda a corregir la postura corporal.
2. Favorece la digestión, reduce los dolores menstruales y combate el estreñimiento,
3. ¡Adelgazante!
4. Mejora la autoestima.
5. Está indicada para tratar ciertas disfunciones sexuales que pueden tener relación con el suelo pélvico, como la falta de libido; además de ayudar a complementar el tratamiento de situaciones de dispareunia (dolor durante las relaciones sexuales), vaginismo (imposibilidad de penetración) y anorgasmia (ausencia de orgasmo). También contribuye a evitar los síntomas de la menopausia.
6. Aumenta la sensualidad y te hace más feliz.
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